La Agencia Nacional de Seguridad Vial y el Gobierno de La Pampa comenzaron formalmente este lunes la primera capacitación en materia de seguridad vial destinada a 270 docentes y directivos de establecimientos educativos, en el marco de la implementación del Plan Federal de Educación Vial.
El director nacional del Centro de Formación en Política de Seguridad Vial, Sebastián Kelman, dijo a Diario Textual que la propuesta formativa busca, como principal objetivo, impulsar la educación vial en las aulas.
La primera etapa está destinada a 270 docentes del nivel primario, con 24 horas cátedra que otorgan puntaje. El objetivo es que se puedan transversalizar los contenidos de seguridad vial, para fomentar futuros ciudadanos responsables y solidarios en la vía pública desde las edades más tempranas. “Pretendemos que la capacitación se replique en todas las materias, desde educación física a matemática. La educación vial es necesaria abordarla por parte de las, en cualquiera de las manteras, sostenido en el tiempo”, manifestó. “Esto es lo que pretendemos inculcarles a los chicos y creo que los docentes son importantísimos en este trabajo, dado que la siniestralidad vial es la principal causa de muerte de los jóvenes del país”, dijo.
“En esta materia hay mucho por hacer y esperamos darles todas las herramientas para trabajar en el aula de forma sostenida, acompañando todo el proceso de formación de los chicos, y que la Educación Vial esté presente desde cada materia, que se hable y que llegue a las familias, para poder tener conductores en una vía pública pacífica y solidaria”, dijo.
Las temáticas que se abordan en tres módulos tratarán temas relacionados a la situación del tránsito en la Argentina y en el mundo, el valor simbólico y estereotipos asociados a la conducción, y todo lo que hace al marco normativo vigente en materia de seguridad vial. Cada módulo cuenta con actividades integradoras e instancias de evaluación.
“Para cambiar hábitos y conductas hay que hacer un trabajo sostenido”, dijo Kelman a Diario Textual. “Los niños son muy receptivos. Son, por ejemplo, los primeros en ponerse el cinturón y en pedir precaución al pasar un semáforo. Si el mensaje les llega a los docentes, va a quedar un reservorio para que se disperse entre los alumnos y las alumnas”, contó.
“Lo importante es que los adultos demos el ejemplo. Es un trabajo con los docentes y los chicos, pero donde la familia debe acompañar”, sostuvo.
Los docentes inscriptos fueron divididos en tres grupos de 90. “Nosotros llevamos inicialmente la capacitación a docentes de nivel primario. La intención es ampliarlo a los otros dos niveles, inicial y secundario. Todo, con plataforma, bibliografía y capacitadores nuestros”, dijo el funcionario.
Explicó que se trata de “vivir la vida pública desde otro lugar” y enseñar “ciudadanía” a los más pequeños. “Es enseñar a moverse con respeto”, dijo. “Las niñeces transcurren en la escuela y en la vía pública, desde el juego, desde la bicicleta, después como acompañantes, como peatones, para luego, de adultos subirse al auto para conducir”.
“Debe crecer visualizándola como un escenario pacifico, donde se contemplen al otro, al diferente, al más vulnerable, ya sea desde un auto de menor porte, desde una bicicleta, hasta una persona mayor, o un anciano o una persona con discapacidad”, expresó. “Debemos entender la vía pública como un lugar de encuentro, no un lugar de lucha, que no gana el que tiene el auto más fuerte en la bocacalle, que hay que dejar pasar al peatón y otro montón de conductas que hay que estudiarlas, atenderlas, quererlas e incorporarlas”.